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  • El proyecto cuenta con el apoyo de Fermoselle Villa del Vino y del Ayuntamiento de la localidad.
  • La reserva busca recuperar el esplendor de los años 50 que vivió Fermoselle, momento en el que contaba con 4.000 hectáreas de viñedo en producción.
  • Las personas interesadas tanto para ceder tierras como arrendarlas pueden inscribirse online a través de esta web o de forma presencial en la oficina de Fermoselle Villa del Vino (Calle Requejo, 101).

 

Fermoselle, 21 de marzo. Para fomentar la recuperación y preservación de las viñas viejas, esencia intrínseca de Fermoselle, y abrir la puerta a nuevos inversores que quieran trabajar las tierras, la asociación sin ánimo de lucro Vinduero-Vindouro ha puesto en marcha el proyecto ‘Reserva de Tierras y Viñedos’. Una iniciativa que ha venida para dar un giro de 360 grados a la situación actual.

El proyecto fue presentado el pasado domingo en el Ayuntamiento de Fermoselle por el presidente de la asociación Vinduero-Vindouro, José Luis Pascual, y por el alcalde de la localidad, José Manuel Pilo, ante decenas de vecinos y vecinas del municipio que acudieron a la cita tanto de forma presencial, como virtual a través de la retransmisión en directo que se realizó desde Facebook.

La producción de vino ha sido históricamente una de las actividades económicas de Fermoselle. La grandeza de aquellos días va a volver a sus tierras de la mano de este proyecto donde todas las personas que tengan tierras o las necesiten para cultivar uva van a poder acudir a la reserva.

Esa potencialidad económica, en los últimos años ha sufrido las consecuencias de la despoblación y envejecimiento de la Villa, que ha supuesto que actualmente muchos viñedos se encuentren sin ser trabajados y por lo tanto improductivos, al no contar los propietarios con condiciones para trabajar o incluso no encontrar personal para contratarle los trabajos. El abandono de los viñedos viejos implicaría la perdida de un patrimonio incalculable, para una zona que ha mantenido durante el último siglo variedades únicas que son el gran futuro de los excelentes vinos que en la Villa se producen.

A esta realidad se ha unido, desde la puesta en marcha del proyecto Fermoselle, Villa del Vino, las numerosas consultas que nos han realizado desde bodegas de otras denominaciones de origen o inversores para poder contar con viñedo en el caso de asentarse o construir una nueva bodega en Fermoselle. Esto conllevaba la necesidad de conseguir tener la materia prima esencial para esas posibles inversiones garantizada, y desde la Reserva de Tierras y Viñedos se podrá favorecer esa localización rápida y en plena producción que satisfaga al inversor.

Esa es la esencia del proyecto: Evitar la desaparición del legado que dejaron antaño los antepasados de los fermosellanos y fermosellanas y poner de nuevo en producción las decenas y decenas de hectáreas de viñedos que se encuentran abandonadas pero con posibilidad de ser recuperadas de nuevo.

Cómo pudieron conocer todas las personas asistentes a la reunión la participación en la reserva es totalmente voluntaria. Los interesados en entrar a formar parte contarán de antemano con toda la información y detalles para tomar la decisión. Si finalmente aceptan se realizará un contrato de alquiler legal con los propietarios siguiendo el modelo establecido por la Junta de Castilla y León. Las gestiones se realizarán desde la asociación sin ánimo de lucro.

Tres modalidades, un mismo objetivo: mantener en producción los viñedos

La primera modalidad está dirigida para aquellas personas que solamente quiere que se mantenga la producción del viñedo. Se establece un contrato de arrendamiento entre el propietario y la asociación de cinco años. Una vez finalizado el contrato, el propietario recupera sus tierras, o renueva el contrato.

La segunda modalidad además del mantenimiento en producción del viñedo busca conseguir un contrato a largo plazo con un inversor o bodega externo. Aquí el propietario además de arrendar las tierras a la asociación quiere que esta busque a un inversor que arriende las tierras a largo plazo, más de quince años. El contrato terminará a los cinco años o en la fecha que se haya determinado el arrendamiento de larga duración.

La tercera modalidad busca vender el viñedo a un inversor nuevo o existente además de mantener la producción de las tierras. En este modelo el propietario arrienda las tierras a la entidad y durante ese tiempo la asociación se encargará de buscar un comprador. El importe íntegro de la venta será para el propietario. Este tipo de contrato finalizará con la venta de las tierras o al paso de cinco años.

La inscripción

Para qué todas las personas interesadas en el proyecto puedan consultar la información general se ha puesto en marcha una web del proyecto. En ella, se han habilitado dos formularios uno para las personas que desean ceder sus tierras y otro para aquellos que necesitan tierras para cultivarlas. Ambos formularios también se encontrarán en formato papel en la oficina de Fermoselle Villa del Vino (Calle Requejo, 101).

Si lo que la persona desea es conocer mejor el proyecto puede dejar sus datos a través de la web y desde la asociación Vinduero-Vindouro se pondrán en contacto o puede llamar al 923141409 o escribiendo un correo a reservadetierras@bodegasfermoselle.com .